La Guardia Real se ha despedido este domingo de la comunidad autónoma de Cantabria con un desfile militar celebrado en la Avenida Manuel García Lago de Santander, compuesto por más de 600 efectivos, varios vehículos y ejemplares de las unidades canina y de caballería.
El ejercicio anual de la Guardia Real en Cantabria comenzó el pasado martes, día 7, y ha incluido numerosas actividades en cerca de treinta localidades de la región, según ha indicado el Gobierno en una nota de prensa.
El acto, que ha reunido a un gran número de ciudadanos que se han acercado al entorno del parque de Mesones, ha estado presidido por jefe del Cuarto Militar de la Casa de su Majestad el Rey, Emilio Gracia Cirugeda, y durante el mismo, el Coronel Jefe de la Guardia Real, Pablo Matero y Álvarez de Toledo, ha dirigido unas palabras a las instituciones y ciudadanos presentes, a los que ha agradecido la acogida de la comunidad autónoma durante la estancia de esta unidad militar en Cantabria.
Por su parte, la presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha jurado este domingo la bandera de España con motivo del ejercicio anual de la Guardia Real, que por primera vez se ha celebrado en la comunidad autónoma con el objetivo de dar a conocer a la ciudadanía cántabra la labor de esta unidad militar.
Junto a Buruaga, alrededor de 300 civiles han realizado su juramento o promesa ante la enseña nacional en la Avenida Manuel García Lago de Santander, entre los que se encontraban también los consejeros de Presidencia, Isabel Urrutia; de Inclusión Social, Begoña Gómez del Río; de Desarrollo Rural, Pablo Palencia; de Salud, César Pascual, y de Fomento, Roberto Media, además de la presidenta del Parlamento, María José González Revuelta; la alcaldesa de Santander, Gema Igual y la delegada del Gobierno, Eugenia Gómez de Diego, junto otros representantes institucionales de Cantabria.
Según ha indicado el Ayuntamiento de Santander en una nota de prensa, la alcaldesa ha expresado el agradecimiento del Consistorio por este programa de actividades que “contribuyen a estrechar los vínculos entre la sociedad civil y la militar, ponen en valor la misión de la Guardia Real al servicio de la Corona y acercan su labor a los ciudadanos”.