La Policía descubre que la cúpula de UGT Madrid cobró entre 2019 y 2021 decenas de cheques con cargo a una cuenta del propio sindicato alimentada con dinero de ayudas públicas
La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional ha descubierto que altos cargos de UGT se repartieron decenas de cheques de hasta 7.000 euros por conceptos no declarados. Los fondos salieron de una cuenta bancaria del sindicato que se alimentó durante años con dinero de subvenciones públicas y con las cuotas de los afiliados a la propia central de trabajadores.
Tal y como ha revelado 'El Confidencial', estas son las conclusiones de la investigación que está llevando a cabo el Juzgado número 21 de Madrid de la exadministrativa e hija de la exdiputada socialista Carmen López, Mayka Tomás Gómez, quien presuntamente falsificó centenares de cheques para quedarse con 4,5 millones de euros de UGT haciéndolo pasar por indemnizaciones del Fogasa a beneficiarios inventados.
Las investigaciones se centraban en el entorno cercano de Mayka Tomás Gómez, sobre todo su marido y dos amigas, quienes supuestamente le habrían facilitado el cobro de cheques para luego abonarlos en hoteles de lujo, vuelos a destinos exóticos y restaurantes. Aunque le foco se ha abierto y apunta ahora a otros empleados del sindicato de trabajadores.
Estos nombres incluyen al secretario general de UGT en Madrid hasta 2021, Luis Miguel López Reíllo, el exvicesecretario general, José María Hernández Martínez, el secretario de Administración de UGT Madrid en 2016 y 2021, Emilio Trillo y su sucesor Clemente Sánchez Arenas.
Estos últimos habrían tenido que ver con el cobro de 114.175 euros en al menos 37 cheques entre 2019 y 2021 derivados de una cuenta de UGT de Caixabank. Quien más sacó fondos según apunta la investigación fue el secretario de la Administración, Emilio Trillo, quien en 2019 cobró un cheque de 5.000 euros y en la segunda parte de 2010 hasta 19 cobros de entre 323 y 7.500 euros.
Su sucesor habría recibido 10 cheques con importes parecidos, astí también Hernández Martínez y el ex secretario general de la central también, con cobros que sumaron los 7.500 euros. Los investigadores inciden sobre la falta de periodicidad de estos abonos así como de justificación de concepto.