En un reconocimiento a su sacrificio, el Ministerio de Defensa ha ascendido a título póstumo a los guardias civiles David Pérez Carracedo y Miguel Ángel González Gómez, asesinados el 9 de febrero de 2024 en Barbate (Cádiz) por una narcolancha que arrolló su embarcación.
El Boletín Oficial de Defensa publicó este 7 de mayo el real decreto que promueve a ambos al empleo de cabo de la Guardia Civil, destacando sus “méritos contraídos” y “virtudes militares sobresalientes”. En el marco del 181º aniversario de la Guardia Civil, Tribuna Benemérita rinde homenaje a estos héroes caídos y a la labor incansable de la Benemérita frente al narcotráfico.
El ascenso póstumo, aprobado por el Consejo de Ministros el 30 de abril de 2025 a propuesta de la ministra de Defensa, Margarita Robles, honra a David Pérez, de 43 años, nacido en Barcelona y padre de dos hijas, destinado en el Grupo de Acción Rápida (GAR) de Navarra, y a Miguel Ángel González, de 39 años, natural de San Fernando (Cádiz), miembro de los Grupos de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) de Algeciras. Ambos perdieron la vida en un operativo contra el narcotráfico en Barbate, cuando una narcolancha embistió su embarcación, un episodio que conmocionó a la Guardia Civil y a la sociedad española.
El real decreto también reconoce a otros agentes fallecidos en acto de servicio: David García Peralta, de la UCE 3, ascendido a cabo mayor tras ser arrollado por un camión; Francisco Javier González González, del SEPRONA, y Alberto Martín Casanueva, ambos promovidos a cabo. Estos ascensos, según el Boletín, responden a “circunstancias excepcionales” y al valor demostrado por los agentes en cumplimiento de su deber.
El reconocimiento institucional llega días después de un avance clave en la investigación del caso Barbate. El pasado 4 de mayo de 2025, la Guardia Civil detuvo al cuarto narcotraficante implicado en el ataque, cerrando el círculo sobre los responsables asesinato de los agentes Pérez y González.
El suceso, ocurrido el 9 de febrero de 2024, puso en evidencia los riesgos que enfrentan los guardias civiles en la lucha contra el narcotráfico en el Estrecho de Gibraltar, una zona de alta actividad delictiva. La detención de los cuatro implicados, según fuentes de la Guardia Civil, es un paso hacia la rendición de cuentas, aunque las heridas en la institución permanecen.
David Pérez y Miguel Ángel González, encarnaban el compromiso de la Guardia Civil con la seguridad ciudadana. Sus historias personales –un padre de familia y un isleño gaditano– reflejan la diversidad y dedicación de los agentes que, día a día, arriesgan sus vidas. El ascenso a cabo, aunque póstumo, es un gesto de gratitud hacia su valentía y un mensaje a sus familias: su sacrificio no será olvidado.
Por Redacción Tribuna Benemérita
Con información del Boletín Oficial de Defensa y la Guardia Civil