El agente realizó durante varios minutos las maniobras de RCP a pie de calle en La Tenderina de la ciudad de Oviedo
Eran las once de la mañana cuando un hombre sufrió una parada cardiaca en mitad de la calle Tenderina Alta de Oviedo, en el barrio de La Tenderina. Por suerte, por la zona pasaba en ese momento un agente de la Guardia Civil fuera de servicio y que está adscrito al puesto de Tineo.
No dudó en prestarle ayuda. Durante varios minutos le practicó una RCP y, a pesar del cansancio, en ningún instante se dio por vencido. Continuo hasta la llegada una UVI móvil y cuyos sanitarios le hicieron varias pruebas antes de trasladarlo al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA).
Este acto heroico se produjo en mitad de la calle sobre las once de la mañana.
Saber realizar una RCP de forma correcta salva vidas.
A través de las manos, se realizan compresiones a la altura del pecho y han de ser entre 100 o 120 por minuto. De esta forma, se consigue que la sangre siga circulando hasta que pueda restablecerse la respiración el enfermo hasta que lleguen los servicios sanitarios.
Las estadísticas en España indican que una de cada tres personas muere por una enfermedad cardiovascular.