El pasado 12 de julio sobre las 07:45 horas, cuando la sargento de la Guardia Civil Patricia Álvarez Muñiz se dirigía a su puesto de trabajo, a la altura del kilómetro 52 de la CL-510 (Collado del Mirón, Avila), presenció un vehículo apartado en la vía y a una mujer sosteniendo un bebé al que vapuleaba y propinaba varias bofetadas en la cara.
La sargento Álvarez detuvo su vehículo y al acercarse al vehículo pudo percartarse de la presencia, ya en el interior del mismo de un bebé de escasa edad en la sillita, instalada en el coche, que se encontraba en estado inconsciente, comprobando igualmente que sobre la citada sillita había un chupete al que le faltaba la tetina.
Por ello, apresuradamente abrió la boca del bebé y observó la tetina al fondo de la garganta obstruyendo la vía respiratoria del niño.
Sin herramientas en el lugar ni los conocimientos básicos para actuar, intentó recuperar la vida del menor haciendo uso de una de las llaves de su llavero, la cual era más alargada que el resto; con mucho temple, y tras dos intentos fallidos, consiguió introducir la llave en el hueco de la tetina, haciendo palanca con el paladar del menor y consiguiendo extraer el objeto de su garganta.
A pesar de ello, el menor continua sin dar señales de vida por lo que la sargento decidió realizar cuatro insuflaciones cubriendo nariz y boca del bebé lo que provocó finalmente el llanto del mismo devolviendo a la vida al menor.